Los palillos coreanos son de metal y tienen una forma aplanada y lisa. Tienen una presencia en la mesa muy elegante y además son un símbolo de educación para los comensales coreanos. Es decir, los cubiertos coreanos siempre deben estar colocados y visibles en la mesa.
Son reutilizables, duraderos y no retienen el olor de cada plato, manteniendo además la máxima higiene porque no se manchan con comidas encurtidas.