El agua de coco es un líquido refrescante (95% de agua pura) extraído de cocos frescos y tiernos, que poco tienen que ver con los de color café que encontramos en las fruterías, verdulerías o en ferias e incluso en algunas playas del litoral español («al rico coco!»). Estos cocos tienen una apariencia diferente, son blancos, tiernos, punteados de un lado y planos por el otro. Los jóvenes tienen por lo general, mayor cantidad de agua, que aquellos que son más grandes y maduros, ya que la pulpa va sustituyendo al agua, a medida que el fruto va madurando.
Comparada con otras bebidas deportivas, el agua de coco no es sólo rica en potasio y sodio sino que en menor cantidad también tiene magnesio, calcio y fósforo y es una buena fuente de antioxidantes. Todos estos componentes la convierten en una inmejorable bebida isotónica natural, que nos ayudará a recuperar la hidratación del organismo, los niveles de energía y acelerar el metabolismo. Esto la convierte en una bebida especialmente adecuada para recuperarse después de un ejercicio extenuante. Si has sudado mucho, añade una pizca de sal de Himalaya al agua de coco y sus propiedades aumentarán exponencialmente.
Ingredientes: jugo de coco joven (80%), agua, pulpa de coco joven, regulador de acidez E330.
Información Nutricional por 100 gr:
Valor Energético : 129 Kj/30Kcal.
Grasas: 0g
Grasas Saturadas: 0g
Hidratos de Carbono: 7.6g
Azucares: 7.6g
Sal: 0.03g
Proteínas: 0g